La oveja negra.

A ver… cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.

Soy el hijo del medio (los que lo somos, bueno ya saben cómo es) tengo un hermano mayor, nos llevamos 1.5 años y mi hermanita menor de quien soy 3 años mayor. Les cuento esto, porque todos los que somos del medio, o sea la mayoría solemos ser la oveja negra, los remolones; no sé por qué, pero es así; creo que estar en el medio del mayor y la pahagüe, influye en nuestro carácter, y como no fuese suficiente, soy escorpiano, los nacidos bajo este signo, tenemos el carácter un poco fuerte, en resumen, sabemos lo que queremos y lo que no, tampoco tenemos miedo de decir las verdades de frente, con las consecuencias que esto acarrea, pero no nos importa.

Bien, el tema es que durante el colegio siempre fui el peor alumno de mi curso, siempre me aplazaba en casi todas las materias, pero las aprobaba en febrero o en abril. Tenía maestra particular pero igual era muy perezoso con el estudio.

Un matrimonio joven con 3 hijos, no habrá sido una tarea sencilla, con negocio de mi padre y mi madre en la docencia, no quiero imaginar cómo era el diario vivir con 3 niños. Pero bueno, siempre fui el respondón, y las cosas siempre eran un poco complicadas para mí porque no quería cumplir con mis obligaciones, no quería barrer el negocio, odiaba hacer fotocopias, pero me gustaba mucho pintar los carteles de papá, siempre le daba una mano de blanco y tenía la meta de no darle 2 manos, que en la primera ya debía quedar bien. Papá siempre me preguntaba: “Le diste 2 manos Pedro” y siempre respondía que sí, pero me encantaba ver como no podía notar la diferencia, y de niño (8 o 9 años) aprendí a hacer bien las cosas de una para no volver a hacerlas.

Todos los hermanos somos diferentes, al igual que todo el mundo, a pesar de todo, son los únicos que estarán contigo durante toda la vida, son tus compinches, tus amigos, y sí la familia es todo. Hoy día soy el que vive más cerca de mis padres (a media cuadra), estuve 10 años deambulando detrás de algunos sueños y del dinero, pero al final hoy tengo el lujo de estar cerca de ellos y ver como las canas ya les ganaron la cabellera.

De alguna forma siempre me consideré la oveja negra, no por ser problemático, sino por ser diferente (aunque en verdad lo era, durante la pubertad no me gustaba nada y les odiaba a todos) aprendía a crecer bajo mis propios conceptos y reglas, ahora me toca lidiar con un mini yo, que es mi hijo, que legalmente somos muy similares en el carácter.

Bien el tema es lo siguiente, hace tiempo que vengo hablando con varias ovejas negras, y nos siempre todos tienen algo positivo que contar, en el sentido que es como estar atrapado en esa realidad por ser diferente. No es rechazo, sino es que somos diferentes, el problema es el precio que debemos pagar por ello. Siempre les hablo que debemos luchar por nuestros sueños, porque hasta que no lo logres, solo serás un soñador, hasta que no alces la copa en tus manos, nunca serás un campeón, solo estarás soñando y encima la oveja negra.

Si sos diferente, entonces que está mal en vos. Y nada está mal, todos somos diferentes, cada uno es bueno en lo que otros son muy malos, los talentos se desarrollan y se puede construir siempre una mejor versión de uno mismo, toda vez que haya interés de por medio, interés real en cambiar tus malos hábitos. Los malos hábitos nos llevan a malas yuntas, o sea el apostador siempre va a buscar otros apostadores, al igual que la chismosa otros chismosos; es tan aburrido y simple trabajar todos los días y todo el día; tanto que no hay tiempo para otra cosa que no sea trabajar, y cuando te vienen con chismes, no tienes tiempo ni interés de escucharlos.

¿Pero entonces que hacemos? Y nada papá, embaapo día y noche, hasta que no lo logres solo serás la oveja negra, con mucho talento, pero sin resultados. Hace tiempo había escrito un post que hablaba de la “Maldición del inteligente” donde básicamente explicaba, por qué la mayoría de los inteligentes fracasan en la vida finalmente por falta de disciplina. Porque aprendes tan rápido que te aburres en poco tiempo de todo, y en el largo camino de la vida, es más importante ser disciplinado que ser inteligente.

Hace unos días entregábamos el máximo esfuerzo como equipo en la cuchillería, pero podemos mejorar aún más, justamente ayer cerraba un pedido muy importante en donde tendremos la oportunidad de volver a superarnos. Y sí, somos muy talentosos, pero si no tuviésemos disciplina, los buenos detalles nunca lo tendríamos, porque al final lo que nos diferencia de otros artesanos, es la suma de todos los detalles que tienen nuestros productos que son la suma de muchísimas horas de trabajo manual.

La oveja negra, es una maldición o una oportunidad, tus actos los van a definir; qué lograste en la vida, que hiciste sin excusas, a que cosas renunciaste para poder cumplir con tus sueños. Como diría uno de mis ídolos, el gran Arnold Schwarzenegger: “Nunca tengas un plan B” en el sentido de que debes enfocarte solo en una cosa y muere detrás de ello. La vida es tan corta como para andar enojado por cosas del pasado. Siempre debemos mirar al futuro y enfocarnos en construir el estilo de vida que nos gustaría llevar en unos años.

El camino a cumplir tus sueños, es un camino solitario porque justamente son tus sueños. Pero debes entender que no hay atajos ni “contactos” que te van a llevar a una sostenibilidad, si bien existen personas que te ayudarán con el “apalancamiento” (término utilizado por Roberto Kiyosaki explicando que a veces surgen oportunidades que te llevan al siguiente nivel), pero al final siempre vas a estar ahí, peleando por tus sueños, manteniendo la calidad de tus productos o servicios y estructurando las bases para que en algún momento puedas llegar a la cima.

De ser la oveja negra, o cambiando de ejemplo de ser el patito feo a ser un cisne, eso ya dependerá de tus actos, podes lamentarte o transformarte en el cisne que podes llegar a ser; sí que “podes” llegar a ser, porque no llegarás a tu máximo nivel sin arder primero, al igual que el acero se templa en la hoguera, deberás de enfrentar un sinfín de adversidades hasta que puedas convertirte en tu mejor versión.

De oveja negra a liderar a la manada…. Ya tu decidirás cual será tus resultados.

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